Ha sido un honor compartir el proceso creativo con las dos profesionales que conjugaron esta visión.
La artista Andi Soto con suma paciencia re-interpretó con precisión lo que hasta el momento solo existía en mi imaginación. Su talento y aportes adicionales a los bosquejos, le dieron vida al espíritu del conflicto del protagonista y la calavera.
Por otro lado, el diseño gráfico, el estilo y formato de la portada, fue un gran aporte de la diseñadora Ruby Wong. Su diseño se apropió de la esencia de la novela, creando expectativa y revelando al lector, el genero de la obra a primera vista.
A continuación las variantes durante el proceso de creación:
Por último, aquí les dejo la portada. Gracias a ambas profesionales por hacer este proyecto posible con su talento.